OMIP: ¿Cómo funciona el mercado de futuros de electricidad?
Al igual que en otros países, el mercado de electricidad se organiza en una serie de intercambios en los que los agentes (compradores y vendedores) intercambian energía para distintos plazos.
A diferencia del mercado diario de la electricidad, en el mercado a plazo o futuro, los agentes participantes negocian la energía que se entregará físicamente con plazos superiores a las 24 horas, es decir, se pueden organizar entregas de energía a semanas, meses, trimestres e incluso años.
En este escenario, los generadores y los compradores pueden actuar en distintos mercados a futuros:
Pueden realizar contratos bilaterales, en los que un comprador y un vendedor intercambian energía por precio. Estas operaciones, a su vez se pueden hacer de dos formas:
- Entrega física de la energía: en este caso, el vendedor pone a disposición del comprador la energía y el comprador pagará el precio prefijado.
- Liquidación financiera: en estos casos no se produce entrega física de la energía, sino que las partes acuerdan pagarse mutuamente la diferencia entre el precio del mercado diario en el momento de liquidar el contrato y el precio pactado en el contrato. Por ejemplo, si el comprador estableció un precio de contrato de 50€/MWH y en el momento de liquidación el mercado diario cierra a 55€/MW, la diferencia la deberá abonar el vendedor. Si por el contrario se hubiera fijado el contrato a 60€/MWH, la diferencia la abonará el comprador.
Pueden acudir a los mercados organizados de futuros (en España y Portugal, es OMIP). En estos mercados se negocian contratos normalizados en cuanto al vencimiento y el importe nominal de las operaciones. Son mercados líquidos y seguros, ya que cuentan con un organismo que actúa como cámara de compensación (es una figura que se sitúa entre comprador y vendedor y asegura que el intercambio se produzca. En caso de que una de las partes falle en la entrega, actúa la cámara ejecutando la garantía de la parte que ha incumplido).
Mercados no organizados (“over the counter” OTC): son mercados no organizados ni estandarizados, en los que los agentes de mercado cierran transacciones a través de terceros intermediarios (brókeres). En estos mercados se utiliza la fórmula de liquidación financiera.
Qué función realizan los mercados de futuros
Los mercados de futuros son relevantes tanto para compradores y vendedores. Les permite gestionar los riesgos y planificar las entregas de energía diaria.
Desde el punto de vista del comprador, poder acudir al mercado de futuros es una ventaja dado que dejará de estar expuesto al precio diario de la energía. En este sentido, garantiza cierta estabilidad a la hora de planificar las entregas de energía a sus clientes, y reduce el riesgo de que el mercado diario sea más elevado que el precio cerrado con sus clientes.
En todo caso, el comprador debe planificar con exactitud la energía que necesitará por adelantado. De lo contrario, podría estar adquiriendo energía que no podrá vender a sus clientes. Desde el punto de vista de los vendedores, el mercado a plazo es muy beneficioso porque, por un lado, les permite reducir riesgos de mercado al fijar por precio cierto su producción.
Para el consumidor final, el hecho de que existan mercados de futuros también es muy positivo, ya que tendrá la posibilidad de comprar la energía que necesitará en un momento futuro a mejor precio. De esta forma, el cliente sabrá en todo momento lo que le costará la energía una vez llegado el inicio del contrato.
¿Cómo se determina el precio?
El precio del mercado de futuros refleja el precio de mercado diario que se espera en una fecha futura. Al igual que en la formación de precios del mercado diario, entra en juego el concepto del coste de oportunidad.
Se debe partir de la base de que un agente siempre puede vender o comprar la energía en el mercado diario o en el mercado de futuros. Si este agente acude al mercado de futuros, automáticamente está renunciando a comprar o vender en el mercado diario, y de esta forma, el precio esperado del mercado diario constituye el coste de oportunidad del mercado de futuros. Por ello, el factor determinante en el coste de oportunidad del precio del mercado a plazo es la previsión de precio del mercado diario en una fecha futura.
Desde un punto de vista práctico, el precio se determina por el cruce entre las curvas de oferta (ofertas que realizan los vendedores) y la curva de demanda (ofertas que realizan los compradores). La casación del precio dependerá de si estamos en un mercado organizado o en un contrato bilateral:
- En el mercado organizado, vendedores y compradores publican sus ofertas en la plataforma OMIP. Una vez se produce casación, se cierra la transacción a través de un procedimiento estandarizado en OMIP.
- En el caso de los contratos bilaterales, son las partes las que acuerdan el precio y la cantidad de energía a entregar.
- En los mercados no organizados (OTC), funciona de forma similar a los contratos bilaterales, con la diferencia de que actúa un tercer intermediario, el bróker.
¿Qué factores influyen en el precio?
Como se ha comentado anteriormente, el precio del mercado de futuros depende en gran medida del coste de oportunidad del mercado de futuros, o, dicho de otra forma, la previsión de precios sobre el mercado diario en una fecha futura. En este contexto, hay varios factores que influirán en ese coste de oportunidad:
- Factores de oferta: precio de los combustibles, derechos de emisión, reservas para generar energía hidroeléctrica, previsión de producción de energías renovables.
- Factores de demanda: situación económica, previsión de crecimiento de la demanda, factores laborales.